Podemos definir la criptorquidia bilateral y/o unilateral como la falta del descenso del testículo o testículos hasta el escroto, pudiendo provocar desde una hernia hasta un tumor.
Se diagnostica básicamente por la palpación entre las 6 y las 12 semanas de edad.
El descenso tiene dos fases, la primera desde su posición original hasta el conducto inguinal, y la segunda atraviesa el conducto inguinal hasta la bolsa escrotal. Según en que zona se quede el testículo puede ser abdominal, que suele ser la mas frecuente, inguinal que está en canal inguinal, o inguino-escrotal que se encuentra entre el escroto y el anillo inguinal. Cabe decir que el anillo inguinal es que que impide que una vez descendidos se estrecha impidiendo el ascenso.
Este "defecto" es más común en perros de raza, siendo mas presente en razas pequeñas y toys.
Hay diferentes opiniones entre los profesionales, unos opinan que es algo que se hereda ya que lo provoca un gen recesivo, y luego están los que piensan en un fallo mecánico que puede ser producido por ejemplo por infecciones del cordón umbilical, que puede producir adherencias en el tejido y/o retrasar la presión intrabdominal que hace falta para descender el testículo. También lo puede producir el que el tamaño de los testiculos sea mas grande que el conducto entre otras causas.
Con esta patología se relaciona la obesidad, modificación del comportamiento, agresividad temporal, nerviosismo y apatía.
El mejor tratamiento para estos casos es el estirpamiento del o los testículos, ya que no existe un tratamiento u operación que asegure que estos se mantengan en la bolsa escrotal. Siempre es aconsejable esperar a los 6-12 meses, ya que en alguna ocasión puede existir una bajada tardía.
Paseo con mi perro.
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